Elon Musk dice que va a llevar 100 personas a Marte lo antes posible. Su gente trabaja sin cesar en el perfeccionamiento de los grandes cohetes que llevarán 100 pioneros a su nuevo hogar, que estará ubicado a 60 millones de kilómetros de la Tierra cuando está en su mejor acercamiento y a 399 millones cuando está en su mayor distancia, ya que los dos planetas se mueven alrededor del sol.

Se necesitará una gran convicción para ir a Marte. La curiosidad científica sobre todo, el ver y sentir otro planeta será algo único, pero el precio será alto. No podrán salir a tomar el sol, porque la atmósfera no los protege contra radiaciones ultravioleta e infrarrojas como aquí en la Tierra. Por tanto, vivirán en túneles o ciudades subterráneas. Habrá mucho trabajo de construcción, porque la gente vivirá en interiores. Tendrán menos gravedad, solamente un tercio, por lo que deberán contrarrestar la descalcificación de sus huesos. Habrá mayor riesgo de cáncer de la piel.

Con el tiempo se adaptarán. Pero mucha gente tendrá tendencia a la depresión. Algunos se regresarán. Con el tiempo sucederán cosas inevitables y alguien robará algo. Habrá homicidios. Cárceles. También se inventarán nuevas diversiones. Habrá iglesias. Estaciones espaciales que rondaran el planeta.

Habrá un líder, presidente, emperador o un grupo de control. Se crearán países. Nuevas leyes (aunque Elon Musk dice que no obedecerá las leyes de la Tierra). Habrá internet marciano. Tormentas de polvo. Hasta que todo esto sea business as usual…