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Con motivo del Día de las Áreas Protegidas Privadas, establecido por el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP), para conmemorarlo cada 30 de julio, la Compañía Guatemalteca de Níquel (CGN), la Compañía Procesadora de Níquel de Izabal (PRONICO), y la Reserva Natural Privada SETAL, mantienen firme su compromiso de preservar las especies de flora y fauna que tienen por hábitat una importante región dentro del Corredor Biológico del Refugio de Vida Silvestre Boca del Polochic, en jurisdicción del municipio de El Estor, Izabal.

SETAL consta de 617 hectáreas y el 80 por ciento de su territorio está inmerso en un humedal. A la fecha ha registrado 110 especie de orquídeas. Además, es un área de anidación del cocodrilo americano y es el hogar del mono aullador, ambas especies en peligro de extinción en el país.

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Fue reconocida oficialmente por el CONAP, con la resolución 87/2009 y también está registrada en la Asociación Nacional de Reservas Ecológicas Privadas de Guatemala (ANREPG). Además, es la primera reserva nacional privada bajo la tutela de un proyecto minero en Guatemala.

Dentro de la reserva se encuentra un vivero forestal en donde se producen especies nativas de la región, para cumplir con el compromiso de recuperar el ecosistema en los lugares donde se desarrollaron actividades extractivas, para restablecer los recursos naturales, incluso con mejores condiciones de las que tuvo en el pasado.

La Reserva Nacional Privada SETAL abre sus puertas a estudiantes de biología y biólogos, nacionales y extranjeros para que desarrollen estudios y proyectos de carácter científico enfocados en la conservación de la biodiversidad; por ejemplo, la pesca científica y la investigación genética de la población del cocodrilo americano que habita en la reserva.

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SETAL vela por mejorar cada día las condiciones de la vida silvestre y natural en esa región al norte del país y permite la participación de las comunidades, quienes se benefician con el fortalecimiento de su desarrollo económico y social.

Otro objetivo primordial es preservar los ambientes naturales que ayudan a Guatemala a disminuir los impactos negativos provocados por el cambio climático.