Ambiente/Cambio Climático

MAPFRE alerta sobre el impacto del cambio climático y la necesidad de fortalecer la protección aseguradora en América Latina

Un nuevo informe revela que la región mantiene una de las brechas de cobertura más altas del mundo frente a desastres naturales, lo que agrava la vulnerabilidad climática y las pérdidas ambientales y económicas.

MAPFRE presentó el informe “Cambio Climático, Riesgos Extraordinarios y Políticas Públicas”, un análisis que expone cómo el calentamiento global está incrementando la frecuencia y severidad de los eventos climáticos extremos en todo el planeta, y cómo esta tendencia afecta de manera particular a regiones altamente vulnerables como América Latina.

Según el documento, América Latina es la segunda región del mundo con mayor brecha de protección aseguradora ante desastres naturales, con un 81% de pérdidas no aseguradas durante la última década. Esto significa que solo el 19% de los daños derivados de eventos extremos cuenta con cobertura, lo que pone en riesgo a hogares, empresas, infraestructura y ecosistemas completos.

El informe señala que el aumento de incendios forestales, inundaciones, sequías, tormentas y otros fenómenos intensificados por el cambio climático ya provoca pérdidas económicas superiores a los 300 millardos de dólares anuales a nivel global, de los cuales solo una fracción está asegurada. Este patrón revela una vulnerabilidad creciente en países con baja penetración de seguros, planificación urbana limitada y población asentada en zonas proclives a desastres.

En Guatemala, esta realidad ya se siente con fuerza. Durante la temporada de lluvias 2025, el país atendió más de 33,900 emergencias asociadas con inundaciones y deslizamientos, especialmente en departamentos como Alta Verapaz, Guatemala y Suchitepéquez.

El PNUD también advierte que los costos por pérdidas y daños vinculados al clima han aumentado de forma sostenida desde los años 80, reforzando la urgencia de invertir en mecanismos de aseguramiento, prevención y reducción de riesgos.

MAPFRE subraya que cerrar esta brecha requiere una acción conjunta entre gobiernos, aseguradoras y organismos multilaterales. Modelos como los seguros paramétricos —que realizan pagos automáticos según variables como lluvias extremas o velocidad del viento— y sistemas de alerta temprana son considerados herramientas clave para fortalecer la resiliencia de las comunidades más expuestas.

La aseguradora también destacó sus propios compromisos: convertirse en una compañía neutra en carbono para 2030 en todos los países donde opera, avanzar hacia el objetivo NetZero para 2050 en sus carteras y desarrollar productos innovadores que apoyen la transición energética, la movilidad eléctrica y la agricultura regenerativa.

El informe concluye que el cambio climático es uno de los mayores desafíos para la estabilidad social y económica, pero también una oportunidad para construir sistemas de protección más robustos, capaces de salvaguardar tanto la vida humana como los ecosistemas frente a un clima cada vez más impredecible.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.