
Expertos destacan que las APP pueden acelerar un modelo de desarrollo más resiliente, competitivo y ambientalmente responsable para las ciudades y puertos del país.
La modernización logística y portuaria se ha convertido en una prioridad nacional para impulsar el desarrollo económico, pero también para construir ciudades más resilientes y sistemas productivos con menor impacto ambiental. En su Boletín Económico de Construcción No.73, la Cámara Guatemalteca de la Construcción reunió a expertos nacionales e internacionales para analizar cómo las alianzas público-privadas (APP) pueden convertirse en herramientas clave para una infraestructura sostenible.
Representantes del sector público, organismos multilaterales y líderes empresariales coincidieron en que el país enfrenta grandes desafíos en costos logísticos, tiempos de despacho y eficiencia portuaria, factores que limitan la competitividad y aumentan la huella ambiental de las operaciones.
Durante el encuentro se destacó que los retos actuales del sistema logístico no solo ralentizan la actividad económica: también generan impactos ambientales adicionales al prolongar tiempos de transporte, consumo energético y emisiones asociadas. Expertos de AGEXPORT y del FMI señalaron que fortalecer la trazabilidad de cargas, reducir tiempos en puertos y modernizar procesos aduaneros son acciones que también contribuyen a una logística más limpia.
Las reformas presentadas por la SAT apuntan a mejorar la facilitación del comercio mediante procesos modernos y digitales, reduciendo burocracia y, con ello, los desplazamientos logísticos innecesarios que aumentan la contaminación.
La Agencia Nacional de Alianzas para el Desarrollo de Infraestructura Económica (ANADIE) subrayó que las APP pueden acelerar proyectos de modernización portuaria, transporte público y obras estratégicas que integren criterios de sostenibilidad desde su diseño. Esto incluye infraestructura más eficiente en energía, materiales de menor impacto y planificación urbana que reduzca la expansión desordenada.
El BID destacó la metodología Value for Money, que permite asegurar que cada proyecto no solo sea eficiente en recursos, sino también responsable ambientalmente y viable en el largo plazo.
Los especialistas remarcaron que las APP son una oportunidad para crear ciudades compactas, conectadas y mejor diseñadas, reduciendo presiones sobre el territorio y mejorando la calidad de vida.
La cooperación público-privada abre la puerta a proyectos de transporte público limpio, corredores logísticos sostenibles y obras urbanas que acompañen el crecimiento poblacional sin comprometer los recursos naturales.
Además, permiten ampliar inversiones en regiones fuera de la metrópoli, impulsando desarrollo equilibrado, mayor competitividad y oportunidades económicas con menor degradación ambiental.
Para la Cámara Guatemalteca de la Construcción, las APP representan una herramienta que combina eficiencia económica, sostenibilidad y un desarrollo urbano más ordenado. Su director ejecutivo, José Andrés Ardón, destacó que estos modelos no solo buscan fortalecer la infraestructura logística, sino construir ciudades más inclusivas, competitivas y ambientalmente responsables.